Hace siglos los páramos han sido pensados, estudiados, habitados y transformados por hombres y mujeres que, desde su entendimiento, han conformando una diversidad de posturas frente a lo que es, lo que significa, lo que integra y lo que conforma la alta montaña. Algunas de estas posturas son mostradas a continuación, pero son limitadas considerando los innumerables conceptos que cada ser pueda imaginar o crear de un lugar tan diverso, extraordinario y mágico.
“El páramo es un ecosistema, un bioma, es un paisaje, es un área geográfica, es una zona de vida, es un espacio de producción, es un símbolo, es inclusive un estado de clima. Además, el valor y el significado del mismo pedazo de páramo pueden ser muy distinto para el campesino que pasta sus animales allá o para el biólogo que estudia un bicho dentro de la paja” ( Hofstede, 2002)
“Por encima de la tierra de los Chibchas está la nada. Las montañas de este país se abren vertiginosamente al cielo, y las aguas cubren la tierra entre ellas. la sabana de las aguas hacia la oscuridad del cielo, y la niebla envolvió todo en un manto impenetrable” (von Powewils-Duerniz, 1930)
“La región de vida paramuna comprende las extensas zonas que coronan las cordilleras entre el bosque andino y el límite inferior de las nieves perpetuas. Está definida como región natural por la relación entre el suelo, el clima, la biota y la influencia humana” (Rangel, 2000)
“Páramo se denomina en los Andes todo lugar donde en una altura desde los 1.700 hasta los 2.000 toisas la vegetación ya no prospera y donde el frío penetra a uno hasta los huesos” Alexander von Humboldt le escribe esto en una carta a su hermano en 1802
Referente externo:
Reporte Humboldt: Número de especies endémicas y especímenes de plantas de páramo